"Sombra y Luz"





¿Cuando comenzó este viaje?
Supongo que todo empezó el día en que mi alma murió un poco por primera vez. Fue dejando pedacitos de ella por doquier. Es el momento en que pierdes aquella libertad primera, la única verdadera, la de la infancia. A partir de ese momento, andas confuso y entre tinieblas, aferrándote a las estrellas polares que intentan iluminar tu oscuro camino. Entonces, a veces, ocurren instantes mágicos que te iluminan por completo. ¿Cuánto dura esta sensación? Puede durar un día, unas semanas, incluso si eres muy afortunado, varios meses. Luego, como alguien sabiamente escribió, queda para siempre en tu alma fragmentada, porque solo recordamos aquello que no sucedió…
Tal vez se trate de nuestro último cartucho intentando recuperar esa libertad primera, auténtica, que tuvimos en la infancia. Es una pregunta sin respuesta porque en eso consiste este extraño viaje: en momentos que nos iluminen lo suficiente para aferrarnos a ellos en los tiempos trágicos, momentos brillantes que nos sacudan el cuerpo y el alma y nos hagan entender lo afortunados que somos… aunque posiblemente no lo merezcamos.
Hay personas que somos como pequeñas gotas de lluvia en la tormenta. No aportamos nada pero formamos parte de ella. A veces, tenemos la fortuna de tropezar con otras que inundan de luz el mundo. Nuestra función quizá consista en estar allí intentando que nadie apague su luz, que nadie les haga dudar de todo su poder, que rían e iluminen con su sonrisa las almas… Quizás consista simplemente en ser espectadores, en recoger su legado… Incluso las sombras importan, porque hacen que entendamos mejor la luz; nadie nos ve, pero sin nosotras quizás no se entendería la luz…
Hasta las sombras sueñan con volverse brillantes, con iluminar a alguien durante un momento, con convertirse en risa… A veces, desean escapar de su mundo, de su tarea encomendada y transformarse en algo nuevo, diferente; desean que las vean, que entiendan que también cuentan, que significan algo. Pero siempre vuelven a la realidad y acaban asumiendo su lugar, aunque apenas nadie lo aprecie, porque alguien tiene que ser sombra.
Quién sabe; quizás dentro de cada pequeña sombra que anhela ser luz se encuentre una pequeña llama luminosa que espera paciente su turno mientras cumple su misión.

3 comentarios:

  1. Delicada Gota de Lluvia, la tuya es otra forma de protagonismo, otra forma de iluminar, el espectador activo que colabora en el éxito del actor... una delicada estrella polar que invita a encontrar el sentido y la parte luminosa que hasta las sombras tienen... Gracias.

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  2. Hola gota de lluvia, yo soy otra gota de lluvia, hoy al encontratre por casualidad, me siento importante. Antes pensaba que era una simple gota de lluvia...y me encuentro por sorpesa con una gota de lluvia llena de luza, y pienso ¿ habrá más gotas de lluvias como tú?,hoy ya no me siento insignificante ... GRACIAS.

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  3. Gracias a ti, me alegro que pueda servir, porque estoy aprendiendo que uno debe compartir aquello que sale de su corazón, asi que gracias a ti por recibirlo.

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