"VENDEDOR DE SUEÑOS"

A veces en el día a día nos olvidamos de soñar, nos introducimos en la rutina cotidiana, la mirada a ras de suelo y la sonrisa sin despertar. Necesitamos un “vendedor de sueños” que nos arranque del estado hipnótico en el que nos encontramos.  Hay muchos a lo largo del día, son aquellos que nunca han dejado de soñar. Y tú ¿qué vendes?

Grafología : Beethoven

Beethoven

La escritura de Beethoven es un ejemplo de escritura explosiva, lo que evidencia su naturaleza intempestiva y temperamental. La tremenda oscilación de letras en cuanto a su inclinación, así como las irregularidades de líneas, tamaño, etc., son signos de inestabilidad anímica, emotividad y reacciones, a menudo excesivas (debido a su elevada sensibilidad).
         El texto muestra una escritura “combinada”, signo grafológico de la creatividad inteligente, propia del genio creador. Gran viveza de imaginación y de carácter. Ese gran dinamismo radiante y expansivo que vemos en su escritura le otorga una buena capacidad creativa rompiendo moldes convencionales.

La rapidez y dinamismo de su escritura muestran autenticidad y honestidad en este músico ilustre. No hay compostura ni maquillaje en su personalidad gráfica, y sí emotividad intensa, apasionamiento, radicalidad, creatividad, orgullo altivo y la inestabilidad típica de una naturaleza extraordinaria y fuera de lo común. Beethoven era una mezcla de infantil y transparente simplicidad y de fuerza de carácter y nobleza de alma que constituye uno de los mayores atractivos de la naturaleza humana.

         La firma revela su naturaleza expansiva, altiva, enérgica (mixta en cuanto curva y angulosidad) y desafiante de su personalidad. Determinado por una voluntad poderosa, capaz de vencer todo tipo de dificultades y obstáculos. Por ejemplo, cuando tuvo que luchar contra su sordera, él mismo confesó: “luché a brazo partido con el destino y no permití que me dominara”. El grafismo que vemos en su firma posee firmeza, optimismo y autenticidad.
Mª Angeles López
Grafóloga

Sobre el aragonito o flor de hierro

El aragonito o aragonita es una de las formas cristalinas del carbonato de calcio (CaCO3), junto con la calcita. Puede encontrarse en forma de estalactitas, y también en la concha de casi todos los moluscos y en el esqueleto de los corales. Entre las variedades del aragonito destaca la llamada flos-ferri (flor de hierro), que se asemeja a un hermoso coral, llamada así por los mineros, pues era frecuente encontrarlo en los depósitos de este metal.
El nombre aragonito se debe al mineralogista Abraham Gottlob Werner, quien en 1788 lo definió a partir de unos ejemplares procedentes de Molina de Aragón, en Guadalajara, que él atribuyó erróneamente a Aragón.
El aragonito se forma a partir de aguas termales o géiseres, aguas filtradas que han entrado en contacto con rocas muy calientes situadas a gran profundidad y que han vuelto a emerger a la superficie. Estas aguas disuelven minerales de las rocas a su paso, entre ellos, el calcio. A medida que las aguas termales se evaporan, el calcio que contienen precipita y, cuando entra en contacto con el aire, se combina con el oxígeno y el dióxido de carbono formando los cristales de aragonito.
El aragonito puede encontrarse formando estalactitas en cuevas. También puede localizarse en rocas metamórficas o en rocas sedimentarias de los fondos oceánicos, así como en los esqueletos de muchos organismos marinos vivos o recientemente fosilizados. Además, es común en zonas oxidadas de yacimientos metálicos.
Los yacimientos de aragonito más importantes se encuentran en España, entre los que destacan el de la localidad de Luzón (Guadalajara), y los de Minglanilla, en Cuenca, donde se encuentra en una gran variedad de colores. Pueden encontrarse cristales pseudohexagonales en Italia y Sicilia, agregados en piña en Marruecos y variedades estalactíticas y coraloideas en Arizona, Chihuahua (México), Francia (de color azul), Austria e Italia.
En Eslovaquia hay una cueva entera formada de aragonito, llamada La cueva de aragonito Ochtinská. Esta cueva está declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y es una de las tres cuevas de aragonito que se han descubierto en el mundo hasta el momento.
Hay una leyenda sobre la flor del hierro:
Lágrimas de Aragonito
Cuenta la leyenda que en la región de Molina de Aragón (en España), vivían dos familias muy ricas y poderosas, pero con una rivalidad más grande que su poder. Para desgracia de ambas familias, entre la hija y el hijo surgió un amor puro y sincero. Cuando los padres de la chica se enteraron, utilizaron todo tipo de artimañas para separarlos y, viendo que no obtenían resultados, decidieron acabar con la vida del joven.
La joven, al enterarse de que su amado había muerto por órdenes de sus familiares, sufrió de desdicha, que lloró y lloró, y su vida se fue extinguiendo poco a poco; sus lágrimas se fueron solidificando con una dureza excepcional, extendiéndose y adoptando formas caprichosas, como carámbanos de nieve por su blancura y brillo.
Se dice que así fue como se originó el aragonito, como ejemplo del amor puro y sincero que se puede dar entre los seres humanos.

Texto sacado de las siguientes fuentes:
ROSA DE HIERRO
Destello de luz envuelto en duro algodón.
El tiempo te dio forma,
el agua y el aire jugaron con tu cabello.

Extraña te sentiste en la inmensa oscuridad,
mas un día una llama iluminó tu oscuro mundo.
De la tierra fuiste arrancada,
el temor se rizó en tu rostro como lenguas de mariposa.
Tus ojos al mundo se abrieron
y descubriste el horror, pero también
la luz, la esperanza…

Un día, una llama de fuego se clavó en tu piel
y desde entonces, frágil rosa de hierro,
sientes el aliento del fuego frente a ti.
Corazones que cantan a tu corazón sombrío...

A través de las arenas del tiempo…
Tú, pequeña rosa de hierro...
Calidez. Frío metal. Esperanza de luz solar…

LDD Julio 11

Alma. "Ten cuidado con lo que deseas..."



Aquí os dejamos una pequeña gran joya de animación de 2009. Es el primer cortometraje de Rodrigo Blass como director, animador de Pixar desde 2002.
Aparte de la atmósfera ligeramente inquietante y la belleza de las imágenes, el contenido tiene su miga.
Habla de aquellas cosas que a veces deseamos tanto que acaban adueñándose de nuestra alma y nos llevan a perdernos dentro de ellas.
Cómo dice el dicho "ten cuidado con lo que deseas... puede cumplirse".
Para que luego digan que no son inquietantes algunos muñecos...